Sangraba. Mierda, sangraba mucho. Entre las vueltas que le daba la cabeza y el vómito que asomaba por el final de la garganta, atinó a comprobar que, definitivamente, no tenía la menor idea de que estaba pasando, ni de donde demonios se encontraba. Luego llegó el vómito, y la contemplación de los colores rojo sangre, blanco y verde, mezclándose aleatoriamente en la ¿ moqueta azul ? . Sin descanso, el golpe. Desde algún lugar de su espalda y sin aviso previo. El color negro, definitivamente, sustituyó a todos los anteriores, y se hizo la tranquilidad…
En realidad, no había sido un día excesivamente fuera de lo normal hasta entonces. Un par de llamadas con amenazas variadas, desde la típica del "sabes que se cosas tuyas" hasta la amenaza real de muerte en toda regla. Además, viniendo de quien venía, era de las jodidas, de esas que no se pueden ni de lejos confundir con una bravata. Más tarde, en plena fábrica, el cruce de acusaciones con el delegado de seguridad. Ciertas en su mayor parte, pero que coño importaba eso. Hoy no era el día adecuado. Ya no.
El día comenzó a cambiar, tras la llamada de Laura. Su voz, solamente su tono, antes de acabar la primera palabra, hizo que todas las alarmas saltasen. Y lo que siguió. No estaba sola. Y los acompañantes no eran amigos. He aquí cuando la palabra angustia se hizo universo. El aire ( ¿ donde coño se ha ido el aire ? ) entraba caliente por la boca; los ojos, incapaces de posarse en nada. El tiempo se hacía eterno. No hay tiempo. Inhala, exhala. Piensa. No hay tiempo. Y entonces, el primer golpe.
PLANETA POL @ElTioPol en tu Twitter
3 comentarios:
¿Extractos de libros? ¿publicado? ¿por publicar?
Misterio... XDDDDDD
Pol, debes continuar la historia, nos tienes en expectación caray...
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