sábado, 20 de abril de 2013

ESCRACHES

Llevamos en España unas semanitas con escraches arriba y abajo.

Resumo para los de fuera de España, que supongo que no llegará la noticia... Con la crisis y el altísimo desempleo se están multiplicando las familias que no pueden pagar las hipotecas de sus casas, el banco las desahucian (en muchos o todos los casos esos bancos han tenido que se ayudados con dinero público, para más coña) y familia a la calle. Ha nacido y ha crecido una Plataforma Anti-Deshaucio que protesta en los casos en los que se va a provocar uno de ellos, han llevado al Parlamento un proyecto de ley y en los últimos tiempos se han puesto a protestar en las puertas de los diputados del partido del gobierno. Y eso está sacando de los nervios a los de ese partido y están día sí día no pensando cómo se puede prohibir.
De repente nos enteramos que esa forma de protesta se llama escrache y que se usó mucho en Argentina contra los que apoyaban la dictadura.


Me imagino que la forma de protesta, al que le toca, le debe ser muy molesta e irritante, pero de ahí a prohibirla como de lo malo lo peor...






Veamos. En concreto mi familia en Ávila (como tantos otros) lleva sufriendo 2 ó 3 días a la semana durante muchííííísimos años una forma de concentración la mar de irritante que es la botellones y cogorzas a la puerta de la casa con su máximo de ruido allá por las 4 ó 5 de la mañana. Ya sabemos que está prohibido, pero poquito prohibido.



Siempre se duda de la legalidad de los cobradores del frac o similares. Al que le toque me imagino que estarán todos los días fuera de quicio.



De siglos hablamos, si nos referimos a las rondas de las Tunas que van a hacer su especie de escrache bajo el balcón de la moza que pretende (que será muy gustoso hasta que pasen el primer Clavelitos de mi corazón).



De similar cantidad de siglos está lo de dar la murga: es decir ponerse a cantar junto a las casas de los pudientes para que le suelten su dinerillo.



Dar la tabarra.

Dar la matraca.

Así que, señorías, si se van a poner a prohibir haganlo por orden de antigüedad, que hay cola, o aguanten serenamente a los que se quejan en las puertas de sus casas (de las de sus señorias) entre otras cosas porque la queja justamente a favor de los que han perdido las suyas (las casas de los desahuciados).

Feliz sábado, sabadete... se me comporten
Saturnino.

PD: de dar la cacerolada, mejor, que nos hable Martina.

No hay comentarios: