miércoles, 14 de abril de 2010

Educación Ambiental: Es hoy no mañana.

Hola como siempre grandes guerreros de este planeta, aterrizándo un poco tarde pero aquí, al pie del cañon.

Me encantaría resaltar las virtudes de la educación ambiental, pero sé que de eso probablemente muchos de ustedes estan cansados. Solo les diré que es una herramienta poderosa, capaz de realizar cambios en lo que los economístas llamamos "los gustos y preferencias" que al final es uno de los componentes de la demanda. Esto es importante pues a través de los bienes que elegimos podemos indicarle al mercado qué tipo de bienes queremos que se produzcan para satisfacer nuestras necesidades y lograr así nuestro máximo bienestar posible, dadas nuestras restricciones presupuestarias.De manera que, compradores responsables y bien informados fortalecen las llamadas Empresas de Responsabilidad Extendida, que son aquellas que producen bienes de forma tal que se minimicen los daños ambientales, o que apoyan alguna iniciativa para cubrir una carencia social. No podemos dejar de mencionar las etiquetas verdes, las cuales certifican que los productos cumplen con ciertas normas en sus procesos productivos en función de proteger el ambiente.

Admiro el trabajo de todas las personas que día tras día realizan esfuerzos para formar a nuevos ciudadanos, conscientes del entorno natural en dónde se desenvuelven, y qué pueden hacer para conservarlo o recuperarlo. Sin embargo, tengo algunas críticas al respecto que quisiera compartir con ustedes:
  •  Según mi criterio, la educación ambiental debe impartirse a todos los ciudadanos, pues las acciones de conservación deben ser realizadas hoy, no dejarselo a las generaciones futuras. Si se apoya la educación ambiental a nivel de escuela básica pensando en la maleabilidad de los niños desestimando al resto de la población, la efectividad de estos programas será débil considerando que los niños aprenden este tipo de conductas por imitación y son los padres y educadores los encargados de reforzarlas. Si nuestros hijos crecen sin ejemplos serán iguales a lo que nosotros somos hoy.

  • Sin un plan interinstitucional coordinado no se conseguirán las metas deseadas, ya que se ha evidenciado que, en la práctica muchos proyectos ambientales han fracasado por causa de esta carencia. Les pongo como ejemplo los planes de reciclaje de desechos de papel y cartón. No es suficiente con tener el personal capacitado para transmitirle a la población los conocimientos necesarios para realizar estas labores que implican desde destinar un lugar seco y suficientemente amplio, hasta selección del material (que no debe estar sucio, ni poseer grapas, tampoco puede ser papel carbón);  o la conformación de brigadas destinadas a recolectar el material para transportarlo a su destino final. Todo este esfuerzo se pierde, si no se ha establecido un enlace con las empresas que recibirán este material, así como también la capacidad de absorción del mismo en un periodo estipulado (un mes, una semana, un año). Además es importante saber si cuentan con la tecnología adecuada para transformar el material y hacerlo aprovechable de nuevo, pues la idea es imitar el proceso natural, que nada desecha, todo lo integra nuevamente dentro de sus procesos en una cadena infinita.Tampoco se puede garantizar la efectividad del programa si no se cuenta con un conjunto de leyes, reglamentos que apoyen este tipo de iniciativas. Traten de imaginarlo, si no se establece previamente el trato con la empresa nuestro reciclaje terminará en el basurero y se habrá perdido todo el tiempo y el dinero invertido en él y con esta crisis financiera internacional no estamos para despilfarros.
No pienso que la educación ambiental sea la cereza del helado, sino una herramiental fundamental y poderosa cuando se  incerta dentro de un plan bien diseñado.

Muchos besos a todos y...a prepararse para las celebraciones del Día de la Tierra a nivel internacional!

Martina

2 comentarios:

SATURNINO dijo...

Sin datos, conste, pero de pura intuición... y a mí que me da que con la educación ambiental se está logrando poquito.
En las escuelas se hacen actividades sobre el consumo responsable y el reciclaje todos, toditos los años... pues oye, yo veo a mis niños y a mis alumnos mucho más despilfarradores y guarros que lo que puedo ser yo o los amigos de mi edad.

Martina dijo...

Muy cierto Satur, en nuestros tiempos nos enseñaban el valor de las cosas y las usabamos hasta que el material se deshacía. Todo lo que no se necesitaba hoy se guardaba para "alguna ocasión" como la vajilla de la abuela, los cubiertos de plástico usado los cuales se lavaban, el carro del abuelo que siempre se mantuvo como nuevo...en fin, creo que la caducidad de lo que usamos actualmente tiene algo que ver...todo se echa a perder muy rápido o pasa de moda y ya nadie lo quiere aunque funcione a la perfección... y yo me pregunto, qué nos perdimos nosotros? y qué está perdiendo esta generación?